Estado Ideal de Rendimiento

Todas las personas en algún momento de su vida han podido realizar en alguna actividad una ejecución muy buena que les ha permitido sentirse plenamente satisfechos. Ese momento que se convirtió en algo muy especial porque en ese día todo salió muy bien, todo resultaba sencillo, no había miedo y todo era seguridad. En ese momento el rendimiento fue máximo independientemente del resultado.

En cualquier actividad que realice una persona (laboral, artística, deportiva, educativa, política, etc.) y que considere muy importante, requiere de un gran esfuerzo en la preparación para alcanzar un máximo rendimiento que le permita conseguir sus metas planteadas.

En el momento del máximo rendimiento cada persona tiene un estado emocional característico que le permite darlo todo en esa situación de evaluación. En ese momento hay una serie de emociones que pueden beneficiar o no, a la ejecución. Un deportista se encuentra en estado de evaluación constante, es por ello que trabajar el aspecto psicológico se convierte en algo necesario si pretende llegar lo más completamente preparado a una competición.

La psicología del deporte ha estudiado como se desarrolla este estado emocional durante la competición. No existe una definición única acerca de este estado, ya que cada una ofrece una serie de características generales, pero ciertos aspectos que las hacen muy particulares. Lo más recomendado es quedarse con esas características que las hacen común y adaptarlas a las necesidades de la actividad a desarrollar, ya que no es el mismo estado emocional para la gimnasia artística, que para el golf o la halterofilia.

La definición que consideramos más adecuada por ser más clara en su aplicación y entendimiento es la que realiza Loher (citado en Eberspächer, 1995), hablando del Estado Ideal de Rendimiento que se caracteriza por lo siguiente:

  • Una sensación de relajación, soltura y de calma.
  • Sin ansiedad o nerviosismo.
  • Energizado y actitud positiva.
  • Mentalmente alerta, enfocado.
  • Sensación de autoconfianza.
  • Autocontrol emocional.

Todas las personas (amas de casa, arquitectos, deportistas, trabajadores sociales, médicos, estudiantes, empresarios, profesores, bailarines, investigadores, etc.) hemos tenido por lo menos alguna vez, un Estado Ideal de Rendimiento, en alguna actividad o tarea, ya sea entrenando o en competición, trabajando o haciendo algo que nos apasiona demasiado, inclusive jugando. La clave está en recordarlo, conocer en qué condiciones (ambientales y personales) se presenta para poder tenerlo nuevamente y poder generarlo a voluntad. La Psicología del Deporte ha estudiado e investigado cuales pueden ser las mejores técnicas y estrategias para su aprendizaje y control.

Referencias

Eberspächer H. (1995). Entrenamiento Mental. Barcelona: Inde.